jueves, 25 de junio de 2015

Restos simbólicos de Pedro Camejo entraron a Caracas al ritmo de los tambores

 
(25/06/2015).- El martes 23 de junio el centro de Caracas se convirtió en el lugar de encuentro de caraqueños y visitantes que recibieron los restos simbólicos de Pedro Camejo, también conocido como Negro Primero.

Justo al frente de la Asamblea Nacional (AN) se colocó una tarima donde músicos, bailarines y declamadores se encargaron de recordar al prócer venezolano que murió durante la Batalla de Carabobo, el 24 de junio 1821.

El elenco tradicional de la Fundación Compañía Nacional de Danza (FCND) sorprendió a los presentes con su canto, música y vestuario colorido. Salieron de la Asamblea Nacional (AN) con pañuelos rojos, agitándolos con su mano derecha y cargando un altar a San Juan Bautista, a propósito de celebrarse el nacimiento del Santo, también el 24 de junio.

Cuando llegaron los restos del Negro Primero al son de los tambores de Tacarigua, las parejas de bailarines y bailarinas, con una sonrisa en el rostro, danzaban en honor al hombre que dio su vida por la independencia de Venezuela, y quien desde entonces se convirtió en un emblema de valentía, heroísmo y resistencia de la negritud venezolana.

Al mismo tiempo otro grupo de personas esperaba los restos simbólicos de Negro Primero que venían desde el Fuerte Tiuna y se desplazaban, en caravana, por la avenida Universidad hasta llegar a la Iglesia San Francisco, donde los esperaban grupos de tambores para rendirle honores.

Allí se encontraba una carreta cargada de flores de varios colores, resguardada por hombres a caballo, y un joven personificando al Negro Primero que comenzó a llevar una caja pequeña de madera con un cuchillo encima también de madera, como símbolo del heroísmo de Pedro Camejo.

Por último el pueblo, que iba detrás de la carreta, se dirigió a la entrada del Hemiciclo Protocolar de la AN, allí lo esperaba el grupo Afrolibertad, quienes al ritmo del tambor entonaron cantos en honor al Negro Primero.

T/ Alybeth Guanipa
F/ Lismar Reyes

No hay comentarios:

Publicar un comentario